Nos acercaremos a la sexualidad en el contexto de la masculinidad, partiendo del sistema y la estructura que nos posiciona a las personas educadas en ese modelo como valores hegemónicos hasta la misma individualidad de la erótica, los deseos, prácticas y exigencias. La educación masculina se ha centrado habitualmente en los valores inculcados de poder, fuerza, control e incluso violencia, impidiendo una erótica satisfactoria en la inmensa mayoría de los casos y haciendo difícil, si no imposible, el establecer relaciones saludables. Intentaremos desatascar los limitantes que nos lo impiden, como los mandatos rígidos de género o las tendencias mainstream en la práctica sexual, confiando en generar o reforzar una sexualidad más libre, placentera y sostenible.